Evaluaciones
Evaluación
Neuropsicológica
Disponemos de una amplia experiencia en valoraciones para descartar trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH).
La evaluación neuropsicológica evalúa y mide el funcionamiento cognitivo, emocional y conductual de una persona, mediante el uso de diversas pruebas estandarizadas, entrevistas clínicas y observaciones, con el fin de obtener información diagnóstica y guiar las intervenciones terapéuticas necesarias.
¿Cuándo se recomienda realizar una evaluación neuropsicológica?
Es recomendable cuando se presentan dificultades relacionadas con la memoria, atención, razonamiento, organización, lenguaje, percepción, coordinación o cambios en la personalidad. Por ejemplo:
Si hay sospecha de trastornos del desarrollo, como el trastorno del espectro autista (TEA) o el trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH)
Si se ha sufrido un traumatismo craneoencefálico moderado o grave se recomienda evaluar las posibles secuelas cognitivas y emocionales.
Si se experimentan cambios significativos en la función cognitiva, como problemas de memoria, deterioro del lenguaje o dificultades en la planificación y organización.
Evaluación Psicopedagogica
Las evaluaciones psicopedagógicas se realizan mediante diferentes técnicas e instrumentos, incluyendo entrevistas con los padres o tutores, pruebas psicométricas y cuestionares, que recopilan la información relevante sobre el individuo.
El objetivo es identificar posibles dificultades de aprendizaje, trastornos del desarrollo o cualquier otra condición que pueda afectar el rendimiento académico y la adaptación escolar del menor.
Los resultados de la evaluación proporcionan información detallada sobre las fortalezas y debilidades del menor, permitiendo al equipo de profesionales desarrollar un plan de intervención educativa adecuado. Estos planes pueden incluir adaptaciones curriculares, programas de apoyo específicos, terapia o derivación a otros especialistas si fuese necesario.
¿Cuándo se recomienda realizar una evaluación psicopedagógica?
Recomendamos realizar este tipo de evaluación cuando se sospecha que un menor está experimentando dificultades significativas en su rendimiento académico. Por ejemplo:
Si el menor presenta problemas persistentes para adquirir habilidades académicas básicas como lectura, escritura o matemáticas, a pesar de recibir la instrucción adecuada.
Si el menor presenta problemas persistentes de comportamiento, dificultades para mantener la atención en clase o hiperactividad que afecta a su desempeño académico.
También puede ser útil para brindar orientación en la elección de carreras o programas educativos, identificando los intereses, habilidades y aptitudes del menor.
